Nitrógeno
El nitrógeno en forma de gas o nitrógeno diatómico (N2), constituye el 78% del aire atmosférico. Su aplicación permite inertizar espacios, desplazando el oxígeno, a objeto de evitar combustión por ejemplo, en estanques de hidrocarburos o elementos inflamables. Por otra parte, y para los efectos de evitar oxidación, se puede aplicar en el interior de envases sellados de alimentos, hasta en espacios libres en cubas vitivinícolas, cámaras frigoríficas u otros espacios en donde sea necesario preservar productos susceptibles de oxidarse. Los equipos PSA, generadores de nitrógeno gas, son de altísima eficiencia, pudiéndose producir los volúmenes necesarios, a un muy bajo coste, y en forma rápida y eficiente.